La resiliencia del sector turístico se ha convertido en una prioridad para diversas instituciones internacionales. La Organización Mundial del Turismo (OMT) y la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNDRR) están liderando iniciativas para integrar la sostenibilidad ambiental y la reducción del riesgo de desastres en las políticas turísticas. Además, la Unión Europea, a través de su Agenda Europea para el Turismo 2030, está impulsando un sector más ecológico y digital. A continuación, se presentan las estrategias y tendencias actuales en este ámbito.

La OMT promueve un turismo sostenible alineado con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Esta agenda fomenta prácticas que integran el desarrollo económico con la sostenibilidad ambiental. Según la OMT, el turismo sostenible no solo protege el medio ambiente, sino que también mejora la calidad de vida de las comunidades locales y preserva el patrimonio cultural. En este sentido, la OMT ha desarrollado diversas iniciativas y programas para fomentar la adopción de prácticas sostenibles en el sector turístico. Por ejemplo, la OMT ha lanzado el programa «One Planet – Sustainable Tourism Programme», que busca promover la sostenibilidad en el turismo a través de la colaboración entre gobiernos, empresas y organizaciones no gubernamentales. Este programa se centra en áreas clave como la gestión sostenible de los recursos naturales, la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y la promoción de prácticas de consumo y producción sostenibles.

Por otro lado, la UNDRR trabaja en sinergia con el sector turístico para desarrollar políticas que reduzcan el riesgo de desastres climáticos. Estas políticas incluyen la planificación a largo plazo y la cooperación internacional. La UNDRR destaca la importancia de la preparación y la respuesta rápida ante eventos climáticos extremos, como huracanes e inundaciones. Además, la UNDRR colabora con diversas organizaciones y gobiernos para desarrollar herramientas y recursos que ayuden a las comunidades turísticas a ser más resilientes frente a los desastres climáticos. Un ejemplo de esta colaboración es la iniciativa «Making Cities Resilient 2030», que busca fortalecer la resiliencia de las ciudades frente a los desastres naturales. Esta iniciativa incluye la creación de planes de acción locales, la capacitación de funcionarios y la implementación de medidas de reducción del riesgo de desastres en las infraestructuras turísticas.

La resiliencia climática en el turismo es una prioridad para diversas instituciones internacionales.

Asimismo, la Unión Europea, a través de su Agenda Europea para el Turismo 2030, se enfoca en un sector más ecológico y digital. Esta agenda busca adaptar infraestructuras y servicios para ser más resilientes frente a los efectos del cambio climático. La UE está invirtiendo en tecnologías verdes y en la digitalización del sector turístico para mejorar la eficiencia y reducir el impacto ambiental. Además, la Agenda Europea para el Turismo 2030 promueve la cooperación entre los Estados miembros para desarrollar políticas y estrategias comunes que fomenten la sostenibilidad y la resiliencia en el turismo. Entre las iniciativas destacadas de la UE se encuentra el programa «Green Deal», que busca transformar la economía europea hacia un modelo más sostenible y bajo en carbono. Este programa incluye medidas específicas para el sector turístico, como la promoción de la movilidad sostenible, la mejora de la eficiencia energética en las infraestructuras turísticas y el fomento de prácticas de turismo responsable.

En cuanto al análisis y las estadísticas, un análisis reciente muestra que el turismo representa aproximadamente el 10% del PIB mundial y es responsable de cerca del 8% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Sin embargo, con la implementación de prácticas sostenibles, se espera que estas cifras disminuyan significativamente en los próximos años. Además, estudios indican que el cambio climático podría afectar gravemente a destinos turísticos populares, lo que subraya la importancia de adoptar medidas de resiliencia y sostenibilidad en el sector. Por ejemplo, un informe de la OMT señala que el aumento del nivel del mar y las temperaturas extremas podrían tener un impacto negativo en destinos costeros y en la industria del esquí. Asimismo, se prevé que los eventos climáticos extremos, como huracanes y tifones, sean más frecuentes e intensos, lo que podría afectar la infraestructura turística y la seguridad de los turistas.

Finalmente, es importante destacar las opiniones de líderes en el ámbito del turismo y la reducción del riesgo de desastres. Zurab Pololikashvili, Secretario General de la OMT, ha afirmado: «El turismo sostenible es esencial para el futuro de nuestro planeta. Debemos trabajar juntos para integrar la sostenibilidad en todas las facetas del turismo.» Por su parte, Mami Mizutori, Representante Especial del Secretario General para la Reducción del Riesgo de Desastres, ha señalado: «La cooperación internacional es clave para reducir el riesgo de desastres climáticos. Necesitamos políticas que promuevan la resiliencia y la preparación.»

La resiliencia climática en el turismo es una prioridad para diversas instituciones internacionales. La OMT, la UNDRR y la Unión Europea están liderando iniciativas para integrar la sostenibilidad ambiental y la reducción del riesgo de desastres en las políticas turísticas. A través de la cooperación internacional, la planificación a largo plazo y la adopción de tecnologías verdes, el sector turístico puede convertirse en un motor de desarrollo sostenible y resiliente frente al cambio climático.

Enlaces de referencia:

https://www.unwto.org/

https://www.un.org/es/observances/tourism-resilience-day

https://www.unwto.org/the-glasgow-declaration-on-climate-action-in-tourism 

https://www.unwto.org/es/tourismo-por-los-ods